La pesca es una de las principales fuentes de riqueza de comunidades como Galicia, siendo uno de los sectores con más empleo directo relacionado con esa actividad.
Según la encuesta más reciente de Ocupesca elaborada por la Consellería del mar (cuyos datos reflejan la población ocupada en el sector pesquero del año 2017) ha detectado un incremento del 7% entre 2015 y 2017. Concretamente hablando, el número de profesionales embarcados que cerró 2017 fue de un total de 11.377. Por su parte, los barcos de artes menores fueron los que más incrementaron su tripulación, un 14,4%.
Claramente, estos datos son un indicio de la importancia que tiene el sector pesquero para una comunidad como Galicia, suponiendo un importante índice de empleo para la población, así como un factor determinante en la economía.
En este sentido, los cambios llevados a cabo por la Comunidad Europea en la política de pesca y el principio de estabilidad relativa, han hecho que España haya disminuido su potencia pesquera. Así pues, los TACs de pesca también tuvieron mucho que ver, ya que controlan los totales admisibles de capturas y las cuotas.
Las elecciones europeas ahogan a la pesca
El Parlamento Europeo y las elecciones del próximo 26 de mayo son claves para el sector pesquero. Muchas de las normas que regulan la actividad pesquera, como los reglamentos de control, el de medidas técnicas o el de la obligación de desembarque de las capturas se adoptan en codecisión con el Consejo de Ministros, actuando la Comisión Europea de árbitro.
Según el gerente de la Cooperativa de armadores de Vigo, José Antonio Suárez Llanos, el “otro de los principales problemas que existe en la pesca es la burocracia». A parte de esto, el tan temido Brexit, que podía ser una estocada al sector pesquero, ha pasado a un segundo plano después de los nuevos plazos dados entre Londres y la Unión Europea.
Sin embargo, a pesar de todo, el sector pesquero gallego ha sabido sobreponerse y es una actividad que genera mucha riqueza y puestos de trabajo. El sector conservero de productos del mar es el más importante de Europa y el del congelado es un referente mundial.