Hoy en día llevamos un estilo de vida que apenas nos deja tiempo para las tareas domésticas y tenemos que rentabilizar nuestro tiempo de la manera más eficaz posible. Pasamos la mayor parte del tiempo fuera de casa y cuando llegamos lo último que nos apetece es ponernos a lavar la ropa, limpiar o cocinar. Principalmente, por este motivo están en pleno auge las lavanderías autoservicio tales como Lavalux, porque por poco dinero y tiempo obtenemos una colada de calidad. 

En este sentido, consumir alimentos frescos también puede ser un incoveniente, pues no disponemos del tiempo suficiente para ir a comprarlos o simplemente prepararlos. Por este motivo, congelar el pescado es una opción ideal para poder consumir este tipo de alimentos sin ningún tipo de problema. También, puedes optar por comprarlo fresco y conservarlo sin congelar pero obviamente te aguanta menos días. 

¿Cómo congelar el pescado?

Antes de nada, debemos atender a una serie de trucos para reconocer el pescado fresco. Posteriormente, debemos saber que la mejor forma de congelar el pescado es por ultracongelación. Es un sistema por el cual se alcanza una temperatura de 0 a -5ºC en menos de dos horas en todo el producto. 

Sin embargo, si no disponemos de este tipo de tecnología, lo primero que debemos hacer es ver es la cantidad de estrellas que tiene nuestro congelador. Un congelador con 3 estrellas, queda un poco corto para la correcta congelación del pescado, estos congeladores están preparados sólo para la conservación de productos congelados. En cambio, si nuestro congelador tiene 4 estrellas está preparado para congelar pescado correctamente y conservarlo durante meses en torno a unos -18º C.

Una vez tengamos claro esta serie de factores importantísimos, debemos preparar el pescado en las raciones que vayamos a consumir. Es importante también limpiar bien las piezas y dejarlas lista para el momento de descongelación. Además, te recomendamos que lo etiquetes poniendo la fecha y el contenido del envase. 

La manera ideal para congelarlo es guardarlo con una envasadora de vacío. Si no disponemos de la envasadora, la mejor opción es es envolverlo en un film, a diferencia de la bolsa. De esta forma evitamos el contacto directo del pescado con el oxígeno, que puede deteriorar su perfecta congelación.

Congelar el pescado, importante para evitar el anisakis

Cada vez más, comer pescado tranquilamente y en condiciones de salubridad correctas, es la preocupación que más ha crecido últimamente en los hogares. Ante la gran crecida de anisakis presente en las vísceras del pescado, es necesario tomar una serie de preocupaciones y medidas para evitar problemas mayores. 

Así pues, congelar el pescado previamente a su consumo y cocinarlo correctamente se convierte en una práctica fundamental, pues la anisakiasis sólo podemos contraerla al consumir pescados o cefalópodos crudos o sometidas a preparaciones que no matan al parásito. Entonces, ¿cómo podemos evitarlo? El primer paso para escapar del anisakis está en el momento de comprar el pescado. Debemos de comprarlo sin vísceras y si viene con ellas, se deben retirar lo antes posible. Posteriormente, para que el pescado sea seguro para nuestra salud, lo cocinaremos a más de 60º y si, por el contrario, queremos comerlo crudo, hay que congelarlo a -20º (una temperatura que solo alcanzan los frigoríficos con tres estrellas o más).

El pescado es un alimento fundamental para nuestra dieta, así que no dejemos de preparar todo tipo de recetas con este producto.